Barcelona es el centro neurálgico de Catalunya. Una ciudad que todo lo puede, que vibra, se expande y se contrae por callejones y avenidas, una ciudad reconocida por su turismo, cultura, deporte, infraestructuras, que respira una mezcla de vientos: mar y montaña se funden en un solo ente.
Una ciudad para perderse y disfrutar de sus rincones, pasear por la ruta Gaudí, pararse a tomar un buen café, escuchar el rumor de sus antiguas murallas, las conversaciones de sus gentes….
Barcelona es pionera en innovación y su entorno es complementario, no la afea, al contrario, se sirve de la tradición y de sus oríGenes como fuente de creación.